martes, 17 de diciembre de 2013

RESIDENCIA PARA INVESTIGADORES







 Javier Garcia Solera - Aulario 3
Huecos entre los muros que marcarían el ritmo de los patios interiores


Protección frente al sol para la cara sur de los bloques

martes, 29 de octubre de 2013



Casa Kaufmann

Richard Neutra

1946-1947. Palm Springs, California


Vivienda de la arquitectura moderna con el aspecto de un avión de plata que acaba de aterrizar sobre una alfombra verde, sujeta por unos pocos bloques de piedra meticulosamente colocados en un “paisaje lunar”.


“La glorieta”


Como en otro de sus proyectos pioneros de la década de 1940, los volúmenes se disuelven de una manera relajada en el lugar, sin renunciar a la tensión de sus obras anteriores. La casa Kaufmann destila espacio en los planos horizontales que se deslizan por encima del vidrio transparente. La única verticalidad destacada es la chimenea situada al lado de la “glorieta”.


Con el espacio destinado a vivienda en el centro, la planta de cruz garantiza que las cuatro alas reciban tanto luz diurna como una buena ventilación. Se garantiza una intimidad extrema tanto a los anfitriones como a los niños, al servicio y a los invitados. La única convivencia entre ellos  se da en los pasillos, en las terrazas y en los patios exteriores. Las láminas verticales de aluminio y un estanque unen la casa con el ala de invitados, hacia el norte.



Para dar un mayor realce a la famosa cualidad “flotante” del diseño, el sistema estructural combina la madera y el acero de forma que la cantidad de elementos verticales necesarios se reduce. Esto se pone especialmente de manifiesto en el salón, cuyas paredes de acero y vidrio se deslizan hacia fuera, mientras que la construcción de cubierta y soportes de la que cuelgan las paredes corredizas se deslizan hacia la piscina y enlazan la casa con esta. Este “brazo radial” se convirtió en el sello característico de Neutra: es la “pata de araña” el cordón umbilical que fusiona el espacio y el edificio.


Otro contraste se manifiesta en los materiales: la piedra natural de Utah, que Neutra utilizó en los exteriores y los interiores, crea un vivo efecto de claroscuro que se diferencia de la textura lisa del resto de acabados. Mientras que en el lado trasero la casa se abre hacia el jardín y el paisaje,  en el lado de la calle aparece bien cerrada con sus sillares de piedra.

Luz y horizontalidad


Casa Farnsworth. Mies Van der Rohe. 

1946-1950. Ilinois, EE.UU 






Intersección de los planos horizontales del forjado sanitario y la cubierta con los ligeros pilares metálicos.



La luz natural nos ofrece sensaciones imposibles de conseguir con otros elementos, nos proporciona calidez y un encanto especial.   

Vivienda totalmente acristalada en todos sus alzados que permite la interacción con el exterior y la entrada de gran cantidad de luz natural.






Villa Escarpa. Mario Martins. 

2012. Luz, Portugal 




La gran fachada combina volúmenes horizontales de color blanco con el cristal que permiten el paso de gran cantidad de luz en el interior de la casa. Estos volúmenes se sientan suavemente sobre la ladera dando la apariencia de una casa flotante sobre el paisaje. Esto asegura una ligereza visual deseable.

La simple presencia de la luz en un espacio arquitectónico no es suficiente, la calidad lumínica es uno de los aspectos más determinantes.  

El reflejo del sol en la lámina de agua y el paso de la luz a través de los grandes paños de vidrio crean en la vivienda una agradable sensación de calidez.






Veles e Vents. David Chipperfield.

2005-2006. Valencia, España. 







Las fachadas se desmaterializan en grandes planos acristalados entre plataformas, gracias a la protección solar que le proporcionan los grandes voladizos. 




El Veles e Vents es su edificio emblema, concebido bajo la forma de grandes balcones suspendidos sobre el mar.     



domingo, 29 de septiembre de 2013


Planta libre, puertas pivotantes.

Le Corbusier 

24 de la calle Nungesser-et-Coli, París


          La vivienda-estudio de Le Corbusier consiste en un apartamento  libre de tabiques para que cada cual pueda compartimentar el piso según sus necesidades. Así, aparte de mostrar la flexibilidad de la planta libre, presenta en su máxima amplitud la gran cantidad de luz que entra por la fachada de cristal.



     

                La superficie del apartamento-estudio  de aproximadamente 240 m2 se reparte en dos niveles vinculados por una escalera interior. La vivienda y el estudio pueden separarse o unirse de manera continua gracias a un sistema de elementos móviles; se trata de  unas enormes puertas de madera pivotantes que permiten la apertura o el cierre de los espacios.








                La entrada al área de vivienda se hace a través de una gran puerta pivotante; el salón con una chimenea en la esquina se prolonga hacia el comedor, que es contiguo a la cocina y al oficio. A la derecha, descubrimos la habitación conyugal detrás de una puerta-armario.





                La vivienda se abre  sobre un balcón-logia que recorre la fachada desde el oficio hasta la habitación. Las estancias son muy luminosas y se benefician de una vista despejada sobre Boulogne. Cuando las puertas pivotantes están abiertas, el conjunto del apartamento-estudio queda bañado de luz por sus dos extremos. Los dos únicos tabiques fijos son los que separan el comedor de la cocina y de la habitación.





Clara Martí Solsona